Adiós (parcial) a la burocracia con ChatGPT

Los centros educativos buscan incansablemente maneras de optimizar sus procesos y reducir la carga burocrática que a menudo consume tiempo valioso. Aquí es donde entra en juego ChatGPT, que promete transformar la forma en que los centros escolares gestionan su documentación.

ChatGPT, gracias a su procesamiento de lenguaje natural, puede ser de una ayuda inestimable en la redacción, revisión y personalización de documentos educativos. Desde la preparación de planes de estudio hasta la creación de informes y circulares, pasando por normas de convivencia, ChatGPT permite a los profesionales de la educación generar documentos de calidad en una fracción del tiempo que normalmente requerirían.

El valor de esta herramienta no radica solo en el ahorro de tiempo, sino también en la mejora de la calidad de los documentos producidos. ChatGPT puede ofrecer sugerencias para una redacción más clara y precisa, ayudar a garantizar que los documentos cumplan con las normativas vigentes e incluso adaptar el lenguaje para que sea más accesible para diferentes públicos.

Además, el uso de ChatGPT en los centros educativos fomenta una mayor eficiencia en la gestión de tareas repetitivas, permitiendo a los educadores y administrativos dedicar más tiempo a tareas que aportan un valor añadido mayor, como la planificación pedagógica, el apoyo directo a los estudiantes y la innovación educativa.

Así, ChatGPT se presenta como una herramienta potente para los centros escolares que buscan maneras de optimizar sus procesos burocráticos sin comprometer la calidad. Su capacidad para procesar y generar textos de manera eficiente abre nuevas vías para la gestión documental, marcando un antes y un después en la forma en que los centros educativos abordan sus tareas administrativas.

Un ejemplo práctico: del ROF al NOFIC

El nuevo ROC de las Islas Baleares reemplaza el antiguo Reglamento de organización y funcionamiento de los centros (ROF) por las Normas de organización, funcionamiento y conveniencia (NOFIC).

Ante esta sustitución burocrática, podemos hacer una copia de la última versión del ROF del centro, e intentar cambiar aquello que no encaje en el nuevo contexto normativo… o podemos hacerlo de nuevo dialogando con ChatGPT!

A continuación, veréis un ejemplo de diálogo con la IA para ir desarrollando, sección por sección, gran parte de este maravilloso nuevo documento.

Cabe decir que en el ejemplo el diálogo es en catalán. Espero que no suponga un obstáculo para entender los pasos seguidos.

Y así hasta que hayamos completado todo el documento. Nuestra es la decisión de modificar todo lo que creamos oportuno para personalizarlo, como también lo es descartar aquello que no nos guste.

Ilustración generada por el autor con Dall-E y Photoshop.