Cuando llega junio, el aire se carga de nervios, las bibliotecas parecen búnkeres antibombas y los alumnos deambulan como zombis con la mochila como única arma. Gafas de sol en interiores para esconder las ojeras y café en la mano como si fuera suero de supervivencia. Si te encuentras en este estado semiconsciente, tranquilo: no estás solo. Y por suerte, la tecnología puede ser tu salvavidas en este naufragio académico.

ChatGPT: tu coach de estudio 24/7

ChatGPT no solo sirve para preguntarle “¿Por qué a los gatos les dan miedo los pepinos?” a las 3 de la mañana. También puede ser tu asistente de estudios hiperpersonalizado. Prueba a decirle:

Tengo exámenes a partir del 10 de junio. Estudio [las asignaturas que tengas que estudiar]. Puedo estudiar unas dos horas por la tarde. Los domingos son sagrados: no se toca nada. Hazme un plan.

e generará un horario más detallado que la agenda de un astronauta. Incluso puede ajustarse si eres noctámbulo, madrugador o un estudiante desesperado que cena galletas.

Divide, estructura y triunfa

ChatGPT te puede hacer sentir como si llevaras un ejército de profes en el móvil, transformándote en una especie de estudiante-terminator del conocimiento. Puede ayudarte a:

• Resumir como un ninja académico con superpoderes: “Resúmeme el pensamiento de Aristóteles como si fuera una historia para contar entre croquetas en la sobremesa. Incluye ejemplos absurdos pero útiles.”
• Crear preguntas de examen que te hagan sudar como en una scape room: “Prepárame 10 preguntas sobre los sistemas económicos, con respuestas plausibles pero confusas. Quiero sufrir un poco.”
• Hacer esquemas visuales como si fueran murales de un documental de la BBC: “Hazme un mapa conceptual sobre la evolución de los estilos artísticos desde el gótico hasta el posmodernismo, como si fuera para una serie de Netflix que va a petarlo.”

El resultado: estudias con método, humor y un toque de magia digital. Y sí, a veces te sentirás como el protagonista de una peli de entrenamiento mental con banda sonora épica. Estudias con la cabeza, no solo con el corazón (y el drama).

Trucos y técnicas que salvan vidas (y notas)

• Técnica Pomodoro: estudia 25 minutos y descansa 5, como si fueras un horno que necesita enfriarse entre hornadas de neuronas. Si se te olvida parar, ChatGPT puede hacer de despertador con voz de madre: “¡Para ya, que te va a estallar la cabeza!”
• Flashcards sin escribir ni una palabra: no hace falta hacer manualidades con cartulinas ni escribir 300 definiciones a mano como un monje medieval. Le dices a ChatGPT: “Hazme flashcards sobre los átomos” y en un momento tienes preguntas y respuestas para jugar al Trivial científico. Ideal para repasar en el bus, en la ducha (con cuidado) o mientras esperas a que hierva la pasta.
• Simulacros de examen: ¿quieres practicar como si estuvieras en la sala de interrogatorios del CSI? ChatGPT puede generar pruebas tipo test, de desarrollo o incluso preguntas surrealistas como: “Explícame el equilibrio de mercado como si fueras un elfo de la Tierra Media.” Es como tener un profe que no cobra, no te juzga y no te hace sentir culpable por no llevar los deberes al día.

Cuando todo se va al garete…

Habrá días en los que querrás lanzar los apuntes por la ventana con la fuerza de un héroe de anime o quemar el libro de mates como si invocaras una hoguera ritual para exorcizar el mal. Cuando eso pase, respira hondo (sí, aunque tengas la cara pegada a los apuntes). ChatGPT no se asusta, no se ofende y, lo más importante, nunca te dirá la odiosa frase: “Solo tienes que organizarte mejor.”

Puedes pedirle que te rehaga el plan de estudio, que te escriba un haiku motivador (“El cerebro colapsa / pero aún puedes aprender / respira, alumno”) o incluso que te genere una excusa surrealista para entregar el trabajo tarde (“Mi gato usó el teclado para enviarlo… pero a la NASA”).

Con ChatGPT a tu lado, estudiar puede que no sea tan estimulante como bañarte en la playa con un flamenco hinchable, pero al menos evitarás el drama griego. Y no subestimes el placer de tener un compañero virtual que nunca te deja tirado ni te pide trabajos de última hora.

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Imagen generada por el autor con Sora

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Esta obra tiene la licencia CC BY-NC-SA 4.0